Artículo traducido del original publicado por Web Hispania el 24 de agosto de 2024.
Ha salido recientemente a la luz, como un zombie mal enterrado, un tuit del 26 de noviembre de 2020, perpetrado por el usuario @OnthisdayRN, una cuenta que se dedica a educar al público con efemérides sobre las gestas de la Royal Navy. Este tuit es un claro ejemplo de la tergiversación histórica que a menudo rodea la figura de Francis Drake y las hazañas navales británicas.
#OnThisDay 1580 Francis Drake returned to #plymouth 3 yrs after leaving, during which he became 1st commander to circumnavigate the world. A replica of his ship the Golden Hind (originally Pelican) is in London. Queens share of treasure was more than rest of her income that year pic.twitter.com/hUUGRpMnEX
— On This Day RN (@OnthisdayRN) September 26, 2020
El tuit en cuestión, traducido, dice así:
«En este día de 1580, Francis Drake regresó a Plymouth tres años después de su partida, durante la cual se convirtió en el primer comandante en circunnavegar el mundo. Una réplica de su barco, el Golden Hind (originalmente Pelican), está en Londres. La parte del tesoro que le correspondió a la reina fue superior al resto de sus ingresos ese año.»
Lo llamativo, y extremadamente patético, es la inclusión del término «comandante» en el texto. Al parecer, la patológica necesidad de los británicos de ser los primeros en todo ha llevado a este usuario a tener que encajar el título de Francis Drake para poder poner «primero» en el tuit, sumando otra gran gesta en los anales británicos. Esta tergiversación de los hechos históricos no solo es engañosa, sino que también disminuye los logros de otros exploradores que precedieron a Drake.
Podían haber puesto «el primer inglés» o incluso «el primer pirata», hechos los dos contrastados o incluso que fue el primer natural de Tavistock, Devon, otro hecho tan fácilmente corroborable como innecesario. Sin embargo, la elección de palabras revela un intento deliberado de tergiversar la historia para engrandecer la figura de Drake.
El uso del término «comandante» en la declaración es engañoso y, en última instancia, irrelevante para la importancia histórica del logro. El hecho de que la primera persona en circunnavegar el globo fuera un capitán, un marinero o tuviera cualquier otro rango no cambia el hecho de quién lo logró primero. Esta tergiversación histórica ignora convenientemente las circunnavegaciones anteriores.
Es crucial recordar que la primera circunnavegación del mundo fue completada por la expedición de Magallanes-Elcano entre 1519 y 1522. Aunque Fernando Magallanes no sobrevivió para completar el viaje, Juan Sebastián Elcano lideró la expedición de regreso a España, completando así la primera vuelta al mundo documentada. Esta hazaña, lograda casi 60 años antes que Drake, a menudo es minimizada en las narrativas británicas, lo que constituye una flagrante tergiversación de los hechos históricos.
Además, es importante mencionar la expedición de García Jofre de Loaísa, que zarpó en 1525 y completó la segunda circunnavegación del mundo en 1536. Aunque esta expedición sufrió numerosas pérdidas, incluyendo la muerte del propio Loaísa, el barco Santa María de la Victoria, bajo el mando de Hernando de la Torre, logró completar el viaje. Esta segunda vuelta al mundo, también anterior a Drake, es frecuentemente omitida en las narrativas anglosajonas, lo que representa otra forma de tergiversación histórica.
La tendencia a exagerar los logros de Drake mientras se minimizan sus fracasos es otra forma de tergiversación histórica. Por ejemplo, el tuit mencionado anteriormente no hace referencia a los numerosos ataques piratas y saqueos que Drake realizó durante su viaje, actividades que hoy en día serían consideradas crímenes internacionales. Esta omisión selectiva de información es una forma sutil pero efectiva de tergiversar la historia.
También puede implicar la tendencia de Drake a esconderse del peligro, como lo hizo varias veces mientras hostigaba a la Armada Española, solo para huir a la vista de los refuerzos que se aproximaban. Estos episodios de cobardía o precaución excesiva, según se mire, rara vez se mencionan en las narrativas glorificadoras de Drake, lo que constituye otra forma de tergiversación por omisión.
«El mar no hace distinciones; trata a todos los marineros por igual, sean oficiales o marineros rasos,» dijo Samuel Pepys, pero al parecer esa igualdad desaparece cuando hay una pasión enfermiza no sólo por engrandecer las empresas de una nación sino menospreciar las grandes epopeyas del Imperio Español. Esta cita de Pepys resalta aún más la ironía de la obsesión británica con los rangos y títulos en sus narrativas históricas.
Debemos recordar que el viaje de Drake alrededor del mundo tuvo lugar entre 1577 y 1580, casi 60 años después del de Elcano. Si bien sus logros son notables, considerando las muchas paradas que hizo para saquear y pillar, no fue el primero, ni el segundo en lograr esta hazaña. La tergiversación de estos hechos no solo es históricamente incorrecta, sino que también disminuye los logros de los exploradores españoles y portugueses que abrieron estas rutas marítimas.
Es importante destacar algunos de los fracasos de Drake que a menudo se omiten en las narrativas británicas, constituyendo otra forma de tergiversación histórica. Por ejemplo, la expedición de Drake-Norris de 1589, conocida como la Contraarmada inglesa, fue un desastre total. Esta expedición, que tenía como objetivo atacar la Península Ibérica, fracasó en todos sus objetivos principales y resultó en la pérdida de numerosos barcos y miles de vidas. Este fracaso rara vez se menciona junto a las «gloriosas» hazañas de Drake, lo que representa una clara tergiversación por omisión.
Otro ejemplo de los fracasos de Drake que a menudo se pasan por alto es su última expedición en 1595-1596. Esta expedición, que tenía como objetivo atacar las colonias españolas en el Caribe, resultó en un fracaso catastrófico. Drake no solo no logró capturar ningún botín significativo, sino que también perdió varios barcos y muchos hombres. El propio Drake murió durante esta expedición, víctima de la disentería. La omisión de estos fracasos en las narrativas populares sobre Drake es otra forma de tergiversación histórica que busca mantener su imagen de «héroe» intacta.
La glorificación excesiva de Drake también tiende a ignorar los aspectos más oscuros de su carrera, como su participación en el comercio de esclavos. En su viaje de 1572-1573, Drake se involucró en el tráfico de esclavos africanos, una actividad que hoy en día se considera un crimen contra la humanidad. Sin embargo, este aspecto de su carrera a menudo se minimiza o se omite por completo en las narrativas británicas, lo que constituye otra forma de tergiversación histórica.
Es patético ver a una nación como Gran Bretaña teniendo que recurrir a estos míseros subterfugios para reclamar una supuesta gloria naval que parece estar desvaneciéndose con el paso del tiempo. La necesidad de tergiversar la historia para mantener una imagen de superioridad naval es un síntoma de inseguridad nacional y una falta de disposición para enfrentar las realidades históricas de manera objetiva.
En conclusión, la tergiversación histórica en torno a la figura de Francis Drake y las hazañas navales británicas es un fenómeno preocupante que distorsiona nuestra comprensión del pasado. Es crucial que los historiadores y el público en general aborden estas narrativas con un ojo crítico, reconociendo tanto los logros como los fracasos de figuras históricas como Drake. Solo a través de una evaluación equilibrada y honesta de la historia podremos apreciar verdaderamente las complejidades de las exploraciones marítimas y el impacto duradero que tuvieron en el mundo.
La tergiversación de la historia no solo hace un flaco favor a la verdad, sino que también perpetúa mitos y estereotipos que pueden tener consecuencias en el presente. Es responsabilidad de todos, historiadores y público en general, cuestionar estas narrativas sesgadas y buscar una comprensión más completa y matizada de nuestro pasado compartido. Solo así podremos aprender verdaderamente de la historia y evitar repetir los errores del pasado.